Ajuste de Cuentos
Ángel Solís
A unos meses de que inicie el proceso electoral 2024, cuando el municipio maya de Felipe Carrillo Puerto vive uno de los mejores momentos en materia de inversión y desarrollo, con la construcción de un Aeropuerto Internacional, una terminal del Tren Maya y una puerta al mar hacia la zona del Playón y Vigía Chico, el ex presidente municipal José Esquivel Vargas, “Chak Meex”, busca sacar del camino a la alcaldesa Mary Hernández Solís, de Morena, quien ya perfila a la reelección o a la diputación federal por el segundo distrito, con cabecera en Chetumal.
Y que luego de casi dos años de haber entregado un ayuntamiento en llamas, donde no había quincena en la que pudiera pagar la totalidad de los sueldos de la burocracia, además de sus excesos, vicios y escándalos sexuales que incluyen la instalación de un tubo en el despacho de la presidencia municipal para que le bailaran de manera privada sus “invitadas”, Chak Meex se estaría dando un balazo en el pie con una demanda millonaria que interpuso ante el juzgado civil de primera instancia de ese municipio.
El ex edil sabe que ya se encuentra “muerto” políticamente hablando por sus antecedentes negativos, al ser rechazada su intentona de reelección en el proceso electoral pasado por los partidos PAN, PRD y PRI e incluso rechazado de tajo por Movimiento Ciudadano, donde buscó refugio político al salir como apestado por los partidos que lo llevaron al poder.
Esta desesperación y el saber que ya no cuenta con futuro político por sus excesos lo están llevando a cometer el peor error de su vida, al presentar una denuncia por un supuesto préstamo de prácticamente tres millones de pesos a la entonces candidata de la 4T, Maricarmen Candelaria Hernández Solís, para gastos presuntamente de su campaña política, lo cual es un delito grave que lo llevaría a la cárcel por una buena temporada.
Y es que los 2 millones 970 mil pesos cuyo pago demanda el ex alcalde José Esquivel a la ahora alcaldesa, presuntamente destinados “para cubrir los gastos que le generarían las elecciones a la presidencia municipal”, representan un delito electoral que deberá ser investigado por la Fiscalía Especializada para la Atención de los Delitos Electorales (FEPADE), ya que el tope de gastos de campaña en el proceso electoral de 2021 para el municipio de Felipe Carrillo Puerto fue de 401,857.72, (poco más de 400 mil pesos), sin contar que Esquivel Vargas era el alcalde en funciones y no se aclara el origen de esos millonarios recursos “dados en préstamo”.
Es descarada la maniobra para intentar descarrilar a la alcaldesa Mary Hernández; negros o mejor dicho Verdes intereses están de por medio porque un aeropuerto con capacidad de más de 4 millones de pasajeros al año, una terminal del Tren Maya y la Puerta de acceso al mar han despertado ambiciones políticas adormecidas hasta antes de la llegada de esta mujer a la alcaldía.
Las gestiones y el trabajo de la joven edil están a la vista y la confianza del presidente Andrés Manuel López Obrador es más que evidente, porque son más de tres mil 200 millones de pesos que invierte el gobierno federal en el nuevo aeropuerto internacional, más todas las obras que vendrán para reforzar la infraestructura, accesos y servicios que demandarán más de 4 millones de personas que arriben al estado en ese municipio de la zona maya.
Es claro que a Chak Meex algo le prometieron o con él negociaron algunos grupos del poder que pretenden apoderarse de Felipe Carrillo Puerto, porque no es casualidad que tuvieran que pasar casi dos años para que interpusiera esta burda demanda, ya que con una pizca de cerebro sabría que estaría reconociendo un delito electoral y que amerita cárcel y la sepultura de su loca carrera política.
Es tiempo de Carrillo Puerto, pero no para zopilotes. Quienes aspiren al poder deberán trabajar para el pueblo y buscar su desarrollo, porque este municipio de la zona maya ha sido bastante saqueado para que vengan vivales a aprovecharse del crecimiento y prosperidad que se avecinan.